Editorial

Resumen

La medicina, como ciencia en constante desarrollo y cambio, exige que la obtención de conocimientos médicos se base únicamente en la investigación científica. La evolución tecnológica de los últimos años ha impulsado un avance sin precedentes en la investigación científica y biológica, traduciéndose en mejores diagnósticos y costos más eficientes.

La respuesta a los múltiples problemas de salud que nos rodean, desde la prevención hasta el diagnóstico, tratamiento y rehabilitación, se encuentra únicamente en la investigación en salud y en enfoques como la medicina basada en la evidencia, iniciada por David Sackett en 1996. Esta se basa en la observación y constancia de hechos evidentes en la práctica de las ciencias de la salud, y hoy se relaciona con otras áreas como la biología celular, la bioingeniería o la mecánica cuántica, las cuales marcarán el futuro de la humanidad a través de la medicina regenerativa, integrativa o no convencional.